CRONICAS DE UN
BICIGRINO ALCANTARINO
ETAPA 3ª: OURENSE - A GUDIÑA
92 km
casi 11 horas de bici
Desnivel subida acumulado: 2.196 m
Desnivel máximo: + 17 %
Desnivel bajada acumulado: 1361 m
Desnivel mínimo: - 18 %
Altura máxima: 1.140,7 m.
Altura mínima: 119 m.
OURENSE - SEIXALBO - REBOREDO - PEREIRAS - A POUSA - XUNQUEIRA DE AMBIA - BOVEDA - A ALBERGUEIRA - LAZA - PORTOCAMBA - A VENDAS - A GUDIÑA
Ver III ALCANTARINA. Etapa 3 "Ourense-Á Gudiña" en un mapa más grande
Domingo 4 de octubre
La etapa gran temida. Cuando estaba diseñando la ruta ya me daba miedo. Pero tras muchos meses de estudio es lo que había. Tenía que enlazar finales de etapa con Albergue para peregrinos.
Llueve mucho durante toda la noche en Ourense. Duermo mal, pero al menos descanso. Hago el petate y me despido de Iñaki. Que decide hacer su camino. Lo entiendo, esta aventura es muy personal y cada uno hace del camino, "Su camino". Nos emplazamos a vernos en A Gudiña o en La Puebla de Sanabría dos días después.
Nada más salir empieza la lluvia. Encuentro el primer tramo del camino bastante malo. Es complicado con las alforjas y tengo muchas dificultades.
Como es la hora del aperitivo y los domingos no lo perdono. Busco un pueblo para papear algo. Llego a Sandiás y me encuentro que hay mercadillo. Me desvío y decido oler lo que hay. Al final, premio. Un puesto con pulpo a feria.
Paro, me doy un merecido descanso y doy cuenta de una generosa ración de pulpo, media botella de Albariño y una barra de pan. Bueno, media. El otro trozo lo dejo para más adelante. Cuanto lo agradecería posteriormente.
Sigo el camino las piernas se van cargando y encima vuelve a llover. Llego a Laza, ya casi con 72 Km. a las espaldas. Me doy un respiro y paro a descansar, comer algo y comprar agua. Me espera lo más duro las subidas con destino A Gudiña.
Subo con el molinillo, muy despacio. Son muchos kilómetros. En algún tramo echo el pié a tierra. Se me esta haciendo muy dura la etapa.
En éstos momentos de cansancio es cuando más echas de menos a la familia. Solo por esos montes. Pero ya sabía a lo que venía. No precisamente de cachondeo. Viviré momentos malos y también momentos buenos. Comprendo a María, mi mujer sus recelos al viajar solo. Le agradezco mucho que aunque no comparta mi locura por lo menos me respeta. Sigo pensando que no me la merezco. Yo que no soy muy dado de palabras románticas. Aquí en la soledad del camino, cuanto la echo de menos. También me acuerdo de mis hijas. Lucía con casi 15 años y tan madura y cariñosa y Aitana, puro nervio pero las dos muy buenas hijas.
Se me está haciendo muy pesada la jornada, desde las 9 que salí de Ourense. Por fin llego A Gudiña.
Son las 19:48 horas cuando llego al Albergue. El último peregrino del día Muy tocado, me presento a la hospedera, en ésta ocasión de Protección Civil. El Albergue prácticamente lleno. Mucha bici de Navarra, León. Un grupo de alemanes y una pareja de Zamora, con la que cenaría más tarde.
Me ducho, colada y a cenar que es muy tarde. En esta ocasión restaurante el peregrino. Una sopa de fideos tamaño familiar y un combinado de huevos, beicon, pimientos y patatas. Y el cachondo del bar me dice que si quiero una ensalada. Finalizo con arroz con leche y cafetito mientras veo perder al Madrid.
No me quedo a la finalización del partido. Necesito descansar, ha sido un día muy largo y estoy destrozado. Me cuesta coger el sueño. En la litera de abajo tengo un león de Salamanca. Como ruge el tío, me dan ganas de meterle un calcetín en la boca. Pero es lo que hay. La gente llega muy tocada a los albergues. Llueve mucho durante toda la noche. Por supuesto no hay Internet en A Gudiña y es muy tarde y lo más importante, estoy destrozado y cuanto más descanse mejor para la etapa de mañana.