XI Alcantarina 2017

E3: ODECEIXE - SAGRES

 

   Odeceixe – Rogil km 12 – Arrifama km 28 - Carrapateira km 52 – Vila do Bpo km 65 -  Cabo San Vicente km 78 – Sagres km 93

  • Distancia: 93 km
  • Ascensión acumulada: 1.639 m
  • Desnivel máximo: 11.42 %
  • Desnivel mínimo: - 12.66 %
  • Altura máxima: 138 m Cerca de Montes dos Cairos
  • Altura mínima: Nivel del mar. Praia do Amado
Powered by Wikiloc

   

   Amanece un día nublado. La típica bruma de costa, que espero que se vaya disipando a lo largo de la mañana. No hay ningún bar abierto por lo que decidimos salir y desayunar en ruta. 

 

  Partimos de Odeceixe por la variante 19 abril buscando la desembocadura del río Mira hasta Praia de Odeceixe. 

 

 

   El dulce flujo del agua que viene desde Monchique, después de refrescar huertas y várzeas, como llaman los portugueses a las extensiones de arena plan, se derrama abundantemente en el océano. En su tramo final, va dejando sedimentos en los márgenes, creando laberínticas zonas húmedas que constituyen hábitats esenciales para la fauna.

 

    Bordeamos los acantilados. La niebla no levanta. El track nos lleva por zona de dunas, carriles de pescadores.  No puedo arrastrar la bici mucho tiempo.

     Por lo que decidimos en vista del tiempo y condiciones del camino del track. Girar a interior y buscar camino alternativo.

 

   

    El día nos depararía impresionantes vistas y senderos junto a acantilados con cerca de 100 m de caída vertical.

 

 

   Seguimos tirando de GPS y caminos locales hasta Rogil km 12. Donde desayunamos. Tostadas y café. Ninguna acierta en el precio final.

 

    Decidimos seguir por carretera por  interior hasta Aldeia Nova donde cogeremos la M-1003-1 buscando costa hasta Praia do Monte Clérigo.

   

   No abandonamos la costa se suceden Praia da Fateixa Monte Clérigo, y Praia da Arrifana.

  

   En ésta tierra  se respira la fuerza de las leyendas y el tiempo de la conquista de Portugal a los moros, el rodar por ésta zona es un auténtico viaje en el tiempo.

 

 

 

    La experiencia es un grado y vamos comprobando que se va levantando la niebla. Estas tres horas de camino adelantado nos dan la razón.  

 

   Aquí no podemos seguir por costa y giramos a interior hasta Valinhos donde seguimos por N-268 que abandonamos  en Chabouco, donde buscamos costa hasta Praia Da Bordeira. 

    La niebla ya ha levantado. Y las imágenes son impresionantes.

  

   Podemos apreciar cómo el mar esculpió la arena en formas armoniosas que van cambiando con las estaciones del año. Esta playa, única y llena de rincones, resultó de la interacción entre los sedimentos venidos de Monchique, los depósitos dejados por el mar, el trabajo insistente del viento y los caprichos de las mareas y de las corrientes.

 

 

  

Un consejo. Si alguna vez pasáis por esta zona.

  

   Merece perder medio día en descubrir la Costa de Carrapateria.

 

 

   Buena pista de tierra que bordea todos los acantilados

 

   A lo largo del recorrido se encuentran varios miradores con magníficas vistas sobre los acantilados y los arenales de Bordeira y Amado y las ruinas de un antiguo pueblo islámico estacional de pescadores.

 

 

  

   Las vistas son impresionantes. Desde la punta podemos ver la Praia da Zimberinha. 

 

  

   El rendimiento de los acantilados comienza a ganar nuevas formas, ya que la roca empieza a ser calcárica desde aquí, hacia el sur. El calcáreo se disuelve fácilmente en el agua de lluvia, que es levemente ácida.

 

  

 

La sucesión de acantilados y playas nos deja sin palabras

 

   

 

No paramos de sorprendernos a cada recodo de costa.

  

   Deleite para la mirada, con su capa de arenisca roja sobre las rocas oscuras y antiguas. Los mejores lugares de observación son accesibles sólo con la marea baja.

 

  

   Llegamos a Praia do Portinho do Forno.

 

 

 

 

 

 

   Libertad en estado puro

 

  Acantilados que sobrepasan muchas veces los 100 metros de altura.

 

  

   Este tramo es donde es posible experimentar la esencia de la Costa Vicentina.

 

 

 

 

 Seguimos por buena pista de costa hasta Praia do Amado.

 

 

   Alberto nos sugiere la idea de avanzar por el cortafuegos. Las duras rampas nos hacen desistir y girar a interior y continuar por carretera.

 

 

 

   Más tarde comprobaríamos que fue sabia la decisión. Senderos impracticables de arenas y rampones imposible se veían a nuestra derecha

   

   En Prainha volvemos a dejar la costa hasta seguir por la N-268 que no abandonamos hasta Vila do Bpo km 65. 

 

   Comida de hamburguesas y siesta de Alberto.

Ya estamos en El Algarve.

       Nos recibe el cálido finisterre portugués.

 

     Resguardada del frío viento del norte, la región del Algarve alberga un jardín de clima mediterráneo que se baña en una larga serie de arenales, entreverados con acantilados a medida que se avanza hacia el oeste.

  

  En sus pueblos aún se palpa la esencia árabe que dejaron las taifas de Sagres y el Algarve, en al-Garb al-Andalus, literalmente "occidente de al-Andalus".

 

   El Algarbe fue conquistada por los cristianos en 1292, la zona acogió la mítica Escuela de Sagres, la de los grandes navegantes que hicieron de Portugal una potencia marítima en el siglo XV. El reino del Algarve existió legalmente hasta 1910. Actualmente, el turismo ha transformado el paisaje del litoral y también la vida cotidiana durante el verano. 

 

   Giramos a costa hasta Cape Saint-Vincent - Farol do Cabo de São Vicente, que dejamos a nuestra derecha.

  

La aguda barbilla del perfil de la Península Ibérica.

 

  En éste tramo el el acantilado, muy alto, proporciona perspectivas únicas. Ornitólogos y birdwatchers "observadores de aves",  son atraídos a Sagres por la migración otoñal de aves planas y de aves marinas, que llegan a sobrepasar a los 5000 individuos de más de 300 especies.

 

    Seguimos costeando hasta Praia do Tonel y Fortaleza de Sagres. Un paseo por los alrededores y seguimos el acantilado. 

 

    
   Pegados al acantilado, tenemos a nuestros pies la playa de Sagres. Un lujo rodar por estas impresionantes vistas.

  

    Nos liamos un poquillo para encontrar el hostell. Pues en el track tenía el anterior que no pude reservar..

Tras preguntar, damos con  el Hostel:

Pura Vida Divehouse  - Rua de pedra negra.

 

22 € en litera con desayuno

 

     Son cerca de las 17 horas.

 

   Mientras hago el cheking. Alberto y Perico hacen colada.

 

 

  

 Tras una larga y merecida ducha, hago yo la colada. Esta todo el tenderete ocupado, por lo que busco alternativas.

  

  Paseo por los alrededores y nos tomamos unas Sagres, como no podía ser de otra forma en ésta ciudad.

 

    Llevábamos varios días jugando al "Precio Justo". Cada vez que parábamos a desayunar o en la comida y cena. Apostábamos por el precio final. Sorprendentemente siempre a la baja. Portugal es mucho más barato que España. 

 

   Nos sentamos en un bar típico de los lugareños y nos tomamos unas Sagres con bollos preñaos. Aquí no acertó ninguno pues los tercios fueron a 80 centimos.

 

   Seguimos el paseo y otras cañas en local de moda. Sagres es ciudad de surf y en éstos locales musicales, ya se sabe, precios de playa. En ésta ocasión no vamos a cenar al programado pues nos pilla algo retirado y decidimos probar en una Típica Churrasqueira portuguesa. 

 

 

 

 

Churrasquiera

Armazem

 

   

   Un buen paseo para estirar piernas y hacer algo de digestión. Y a al Hostel. Sorpresa al llegar pues faltaba la ropa tendida y zapas de Alberto. Al día siguiente las devolverían al recoger todo y guardarlo en almacén. Yo no tengo ningún problema ya que no hubo partido de basket .... jeje  

 

   Pronto en la cama. Esta noche tenemos vecino de litera. Menudos ronquidos el tío. Hace calor y dejamos las ventanas abiertas.... error = mosquitos. Tenemos una noche toledana con los  mosquitos. Después me enteraría de un paseo nocturno de Alberto Y Perico a eso de las 03:30 de la mañana. Aburridos por no poder conciliar sueño por el calor y los mosquitos.